sábado, 22 de abril de 2017

Sima Turio I (Fanzara)



Tras ver publicada la actividad en el Foro quedadas y después de un largo periodo de inactividad espeleológica (desde campaña de Bejes ) contacté con Arturo para concertar lugar y hora de quedada.

Aproximación de unos 50 minutos hasta la boca de entrada a Turio I que se encuentra tras la ascensión al Monte Turio, donde desde su cima a 665 metros se puede contemplar un fabuloso paisaje. A unos 50 m, junto a una higuera, está la Sima del Turio II.

En el pozo de entrada de 9 metros, es conveniente instalarlo con una cuerda de 25 metros, así nos sirve de ayuda y seguridad para, a la salida, afrontar una pendiente de 40º y 47º de inclinación que nos encontramos tras el primer pozo, ya que está resbaladiza. Continuando por la pendiente hay un destrepe 3 metros (con posibilidad de instalar cuerda, pero no necesaria) que desemboca en una sala, donde se instala el pozo de 65.


Tras bajarlo, y con la intención de instalar el siguiente P55, accedimos a un pozo de 40 que descartamos instalarlo por la estrechez y que no tenía pinta de mucho interés, por lo que continuamos la búsqueda de las instalaciones para continuar con el descenso de la fractura. Como no quisimos acceder a una zona peligrosa donde se intuía la continuidad decidimos que ya era hora de desinstalar la cavidad.


Un vez en el coche y tras el recuento del material, nos faltaba una instalación (chapa y mosquetón) que será repuesta tal y como se establece en nuestro Reglamento de material.

En total de la una actividad de unas 6 horas, buena jornada para retomar las salidas espeleológicas.

Se puede consultar la localización exacta y la aproximación en este enlace
Topografía y descripción en este enlace

Participantes:
- Arturo (fotos)
- Raimon (redacción)

jueves, 13 de abril de 2017

Barranco Centenario.

Jueves Santo. 10 am. Dos experimentados barranqueros; Andres y Loli junto a Soro, nuevo fichaje. Salimos en dos coches rumbo a Zucaina, en Castellón interior, con el fin de disfrutar el Barranco Centenario…un nombre que ya inquieta.

Casi dos horas mas tarde, ya habiendo dejado uno de los coches en la salida del barranco, llegamos al punto de inicio. Dejamos el coche al costado de unas casitas de piedra y un pequeño rio.

Tras escasos metros caminando rio abajo nos topamos con el primer rapel.
Día soleado y agua fría nos ponen en acción.

Un grupo de empresa en nuestro camino desaparece con el salto del guía en la primera poza.
Tras varios rapeles de diferentes alturas y pozas sucesivas llegamos finalmente al imponente rapel de 6o metros.
Larga cascadita de agua sobre verde musgo. Me gusta!. Al momento veo un cuerpo descendente allá abajo… es Loli! Andres sonríe mientras siente el tacto de la nueva cuerda de 120 metros.
Un cosquilleo en el estómago. Me impone la magnitud del lugar. Yo no estoy acostumbrado.  Loli trata de liberar la cuerda, allá, lejos de nuestra visión, mientras  Andres menciona  que algo no está bien. Pero Loli resuelve sin complicaciones. Me toca. Hermosa sensación bañada de vida. Loli desde abajo asegura mi descenso. El miedo trepa por la cuerda y trata de agarrarme a mitad de rapel. Lo siento, -le digo. ¡¡Tengo que bajar!!











La complicidad y destreza de Andres y Loli convierten la experiencia en un cómodo y sencillo descenso, con intenso final.

Y unas instalaciones óptimas. Se me hizo corto el barranco que completamos en un par de horas aproximadamente. A escasos diez minutos llegamos al coche por la parte derecha del riachuelo. Y veinte minutos después saciábamos nuestra satisfacción con una cervecita.

Y bonito paseo esparraguero por las tierras de Montanejos.










Un día Inolvidable.

Redacción: Carlos Soro.