lunes, 31 de octubre de 2011

Travesía de montaña en Pirineo Catalán.


Os presentamos una nueva crónica sobre esta travesía por el Pirineo Catalán, en el Parque Nacional de Aigüestortes, realizada el fin de semana anterior al puente de todos los Santos (29 y 30 octubre 2011).

Dada la previsión de lluvias en toda la cuenca mediterránea, finalmente quedó anulada la salida a la cresta de Castellets y como opción se programó en nuestro Foro de quedadas, una travesía por varios refugios del pirineo catalán con opción de ascender algún tremil pirenaico. Como no se apuntó ningún tracalero, nos fuimos el viernes por la tarde, mano a mano, el señor secretario (Guillermo) y un servidor (Raimon). En este viaje decidimos cambiar el pirineo oscense por el catalán, y tras unas 6 horas de viaje, llegamos a la presa de Cavallers, donde plantamos la tienda de campaña.



Las reseñas indicaban unas 3 horas y media de ascensión hasta la Punta Alta (3.014 m) y desde su cumbre dirigirnos al refugio de Ventosa y Calvell, aproximadamente cerca de tres horas más. Pasadas las nueve de la mañana, una vez preparadas nuestras mochilas para tres días de travesía y la foto inicial de rigor, nos dirigimos hacia el barranco de Comalesbienes, superando unas  primeras curvas que nos dejaban a pie del barranco. Una dura ascensión de poco más de una hora nos permitió abandonar la presa de Cavallers y superar un desnivel de 500 metros por el margen derecho del barranco. Cuando echabas la vista atrás, el paisaje era realmente bello, el otoño nos deleitaba una mezcla de colores rojizos, granates, ocres más distintas tonalidades de amarillo y verde.  

Realizamos nuestro primer descanso tras superar una zona boscosa, donde ya se divisaba la nieve a cota 2.500 m. acto seguido afrontamos un laberinto de bloques a las que nos habían dirigidos unos hitos. 
La progresión era dificultosa debido al cuidado de no meter la pierna por algún agujero. La niebla se nos echaba encima y nos cruzamos con una pareja que nos indicó que desistían de ascender la Punta Alta por el estado de la nieve y la niebla. A pesar de ello continuamos nuestra marcha, siguiendo el trayecto que nos marcaban los hitos, el problema es que no progresábamos debido al caos de bloques, y tras revisar y estudiar el terreno, observamos que uno de los tracks que llevábamos grabado en el gps discurría unos 200 metros dirección hacía el torrent de Comalesbienes y optamos por llegar hasta él.



 Una vez retomado el camino, llegamos al Estany Gran de Comalesbienes (2.580m.), y a partir de este punto la ascensión hasta la Punta Alta, fue un verdadero desafío por el estado en que se encontraba la nieve. Íbamos todo el trayecto de ascensión abriendo huella, nos hundíamos hasta la rodilla, la progresión resultaba laboriosa y dura, el tiempo previsto que nos habíamos marcado, 4 horas y media hasta cumbre, ya había sido rebasado. Nos íbamos turnando en cabeza y no veas como descansabas cuando tocaba seguir la huella. En cabeza había tramos que te quedabas sentado en la nieve.
Cada 100 metros ascendidos me giraba y le preguntaba a Guillermo por el horario, eran sobre las 15 horas y no estábamos ni a cota 2.800. Decidimos continuar, a sabiendas que se nos haría de noche antes de llegar al refugio, el problema es que resultaba difícil estimar la hora de cumbre, el estado de la nieve y el peso que soportábamos de la mochila no era para hacer una ascensión invernal. Sin descanso tiramos hacia arriba, se nos hicieron las cuatro de la tarde pero ya nos encontrábamos a cota +/- 2.950m. Una última trepada por la  cresta y finalmente llegamos al mojón de cumbre, eran las cuatro y media, más de 7 horas nos había costado la ascensión (de 3 y media que indicaba, sin nieve claro), pero no había tiempo que demorarse, foto rápida individual y listos para descender.
Cima del Punta Alta (3.014 m)

Debido a la nieve fue dificultoso perfilar nuestra bajada, los hitos estaban sepultados por la nieve y el track solo servía para orientarnos.  

Afrontamos unos destrepes comprometidos,  y durante toda la bajada hundiéndonos bastante en la nieve, poco a poco descendíamos cota pero sin tomar descansos para abandonar la nieve y llegar lo antes posible al estany de la roca (2.390m). Estábamos aprovechando al máximo las últimas horas de luz solar pero se nos hizo las 8 de la tarde y encendimos nuestros frontales, la suerte es que hacía tiempo que discurríamos por senda y solo nos quedaba por ladear el nacimiento del Estany negre y afrontar una última subida hasta llegar al refugio de Ventosa y Calvell (2.220m).

Refugio de Ventosa y Calvell (2.220m)


Llegamos después de once horas de pateo, el refugio lo compartimos con un grupo de 4 personas que realizaban una ruta por distintos refugios del circuito de Carros de foc, y tras secarnos y cambiarnos de ropa cenamos algo calentito (sopa y fideos chinos) y a dormir que ya tocaba. Las mismas horas que duró la jornada anterior las pasamos descansando (once), puesto que no teníamos prisa alguna en llegar a nuestro próximo destino, el refugio de Besiberri. Después de secarse un poco la ropa que utilizamos, emprendimos la marcha hacia el embalse de Cavallers, hacía un día soleado que fue aprovechado por bastantes senderistas con quienes nos íbamos cruzando durante la bajada.

embalse de Cavallers

Al llegar a la parte alta del embalse, realizamos un giro dirección al barranco de Riumalo, donde empezaba una pendiente subida bordeando el propio río. Tras llevar una hora de ascensión, sobre las 13:00 horas del domingo, nos cruzamos con una pareja de montañeros que venían de intentar ascender el Besiberri nord. Nos comentaron que por el estado de la nieve se habían dado media vuelta, y que habían hecho noche en tienda de campaña al lado del estanyet de Riumalo. Cual fue nuestra sorpresa al preguntarles porque no habían dormido en el refugio de Besiberri y respondernos que ya no existía al haber cambiado su situación. Ahora se encontraba al otro lado de la cresta de los besiberris, por lo que no podíamos llegar hasta el. Menos mal que nos encontramos a esta pareja porque de lo contrario nos hubiésemos vuelto locos buscando el refugio y lo más grave tener luego que bajar luego hasta el coche y a oscuras. La noticia despejó algunas dudas que teníamos, ya que en el mapa de Guillermo no aparecía el dibujo del refugio, en cambio en la reseña que llevábamos actualizada del 2.007 si aparece. Otra duda que tuve es que si el refugio más alto del pirineo es el de Tucarroya (2.666 m) este del Besiberri lo situaba a 2.760 m.

Así pues descansamos 5 minutos mientras decidíamos que hacer, llegar desde nos encontrábamos a otro refugio no era viable, y tener que coger coche para ello no era apetecible, por lo que optamos por llegar hasta el coche y  comer bien en algún bar y retornar a casa. Así hicimos y llegamos a Valencia el domingo por la noche con la ventaja de que todavía nos quedaban dos días para aprovechar el puente de todos los santos.


Participantes: Raimon y Guillermo
Redacción: Raimon
Fotos: Guillermo

domingo, 30 de octubre de 2011

Barranc de la Pinella



Actividad: descenso de barranco
VISTABELLA DEL MAESTRAT
Distancia recorrida: 5,13 kilómetros
Altitud min: 629 metros, max: 959 metros
Desnivel acum. Subiendo: 444 metros. Bajando: 501 metros
Grado de dificultad: Moderado
Fecha: noviembre 08, Noviembre del 2011
Finaliza en el punto de partida (circular): Si
Instalaciones: parabolts inox, placas con anilla inox
Cuerdas: 2 x 30
Participantes: Marga, Oscar y yo (Vicent).



Desde hace algún tiempo nos rondaba por la cabeza acercarnos a Vistabella del Maestrat. Zona para hacer alguno de los barrancos que tiene Barrancos secos con buenos desniveles pero poco frecuentados.

Salimos de Valencia con amenaza de lluvia, fue acercarnos al maestrazgo y nos topamos con un día espectacular. Pasada Vistabella llegamos a el cruce donde está la pista que sube a San Juan del Penyagolosa, cogemos la carretera de la izquierda hasta un desvío a la derecha a la altura de una gran balsa de riego, seguimos por la pista asfaltada en gran parte del recorrido hasta llegar al parking pasadas unas masías situadas en una zona espectacular.






Aquí está..........
La aproximación al la cabecera es confusa, ya que no existe ninguna senda definida simplemente nos limitamos a seguir el que pensamos es un afluente del barranco cruzando bancales abandonados y zonas de bosque, al fin encontramos unas marcas rojas que nos confirman que vamos por buen camino.
























Nos encontramos con el primer rapel, de los 13 que tiene el barranco, la primera parte del barranco transcurre por zonas abiertas, descendemos 7 rapels de 8,8,12,6,15 y 20 mts y varios destrepes, a mitad de recorrido avanzamos por una zona con poco desnivel, algunos destrepes y 3 rapels de 7,7 y 8 mts.
















Ya en la zona final del recorrido nos encontramos con la parte del barranco mas encajonada, bien esculpida y con una sucesión de rapels 7,14 y 30 mts este ultimo en volado.



Pasamos por debajo de unos enormes bloques desprendidos y nos vamos a buscar la salida del barranco. Aproximadamente a 100 metros del último rapel encontramos un hito que nos indica el inicio del camino de retorno, no existe senda ni camino de ningún tipo por lo que tenemos que buscarnos la vida campo a través por la ladera, buscando los pasos entre pedreras, matorrales y alguna trepada fácil 3º lo que nos hace la subida más amena y divertida.





 Ya nos queda poco tiempo de luz natural y la dura subida nos hacen dudar si hemos acertado con el camino de retorno, ya en la loma buscamos un collado que no lleva a la pista que nos devolverá al parking.







El barranco es muy aconsejable, las instalaciones impecables, los 13 rapels y multitud de destrepes lo hacen ameno y la zona muy salvaje nos permite ver fauna con bastante facilidad. Pronto regresaremos a por los barrancos que quedan en la zona.


Podéis ver todas las fotos y el track en el siguiente enlace:





Saludos, Vicent.

domingo, 23 de octubre de 2011

Barranco d´En Girona

Domingo, nada qué hacer, Miguel y yo (Vanesa) aburridos como dos ostras! Xe! “Nemon” a Morella a hacer un barranquito o dos si se tercia.

Pertenece als Ports, el río apenas con agua en ese momento Bergantes en un paraje precioso de caliza. Un barranco cortito apenas 250 m de longitud y 75 m de desnivel


(Fui sobre todo a estrenar el fantástico neopreno que me regaló mi mamá)

Llegamos a un parque eólico, tras más tiempo en la carretera del que hubiéramos deseado. Comenzamos a andar por una pista forestal, ya que no encontramos la senda para acceder a la cabecera, decidimos atajar campo a través, campo de toros y de vacas con accidentes calentitos y no tan calentitos dispersos por todo el suelo.
   
Tras más de 45 minutos descendiendo al montaña llegamos a un riachuelo, bien!

Sigámoslo, no hay pérdida, qué tontos! Desde abajo, se ve fácilmente que desde la senda hay que buscar una especie de montículo de piedra que tapa completamente el barranco que es súper encañonado.

Precioso, no hemos podido elegir mejor la temporada, un crisol de contrastes: la caliza: gris, elegante regia; el agua: azul y fría como un témpano y una siembra por doquier, de hojas doradas, caídas, flotando livianamente sobre las aguas. Qué paisaje! es tranquilizador… si no fuera por los toros!

Apresuro a Miguel a bajar, vamos andando se gira con cara de susto y me dice corre! Y yo le hago caso! Hasta la rodilla de barro y heces de vaca! El tonto de él qué susto me ha dado: era mentira! Te daré el divorcio y los niños para ti también! Bueno le perdonaré al fin y al cabo el lleva las cuerdas!

Estamos en la cabecera, la roca resbala mucho a pesar del calzado especializado, son prácticamente algo más que destrepes con pequeñas lagunitas a los pies de la vertical.

Poco, a poco me supo el barranco, podíamos haberlo combinado con otros de la zona, pero se nos hizo tarde al perdernos. 

Alcanzamos el final y comenzamos a subir por la senda, vemos muflones! Bueno, creo que lo eran (también podían haber sido naves espaciales) porque como me daba miedito los toros iba cantando a toda mecha Bisbal para atormentar y hacer sangrar los oídos a Miguel y sin mirar a los lados! No fuera que viera un toro subversivo!. El sol nos va entrando en calor y llegamos de nuevo al parque eólico.

 Un barranco cortito para disfrutar luego de una visita a Morella. Recomendable cien por cien.

Redacción y fotografía: Ariadna.

lunes, 3 de octubre de 2011

Cresta de les Coves, Cabeço d'Or

Actividad: alpinismo
cerca de Espartal, Valencia
Distancia recorrida: 2,76 kilómetros
Altitud min: 509 metros, max: 830 metros
Desnivel acum.
subiendo: 370 metros,
bajando: 372 metros
Grado de dificultad: Moderado
Tiempo: 4 horas 51 minutos

Escaladores:
MANU
GUILLERMO
JOSE JOVIPAK
VICENT ALB


Hacia tiempo que le
teníamos ganas a una cresta de la que apenas teníamos información,
tan solo unas fotos en una crónica muy escueta que nos decía que la mayor dificultad de la cresta era su grado de descomposición.















El Sábado 24 decidimos acercarnos al CabeÇo d´or y ver como pintaba la cresta.
El viernes de madrugada el paso de un buen frente de lluvias sumado al estado de la roca no auguraba nada bueno.











Nada mas llegar y ver la cresta nos dimos cuenta que seria mucho mas divertida de lo que esperábamos. Nos dirigimos a la entrada cuevas de Canalobre para coger el sendero que nos lleva a las primeras trepadas de la cresta.














Nos metemos en faena:

primeras trepadas sin dificultad y vamos ganando metros a la cresta,



















por fin la cosa se pone interesante llegamos a una pared con poco grado, pero que nos obliga a montar el primer largo.























Una trepada facilona IV
















Superado el muro ........

















la cresta se va afilando.....



















y nos deja ver lo que nos queda
por delante unas trepadas mas,
un paso afilado y un espolón que promete.





















Montamos un pasamanos en el paso mas
afilado y descompuesto de la cresta para que quede clara nuestra vocacion barranquera .........
















nos vamos a por el espolón sin complicaciones,
si no fuese por algún desprendimiento de roca bajo nuestros pies afortunadamentesin consecuencias,



















superado el espolón nos dirigimos al collado para buscar la bajada al parking,












encontramos una bajada bestial entre las paredes de escalada del cabeço d´or , después de una carrera por la pedrera llegamos al coche contentos por haber disfrutado
de esta cresta
.