sábado, 9 de mayo de 2015

Descenso Balcez integral (26Km - 14h)

 El río Isuala, a su paso por la sierra de Guara, y tras comenzar en las aldeas de As Bellostas y Bagüeste y finalizar en Alberuela de Laliena, adopta el nombre de Barranco Balcez convirtiéndose en el más largo y encañonado de toda la Sierra.de Guara.









La parte Superior comprenden 17 km hasta la llegada a los Oscuros del Balcez, partiendo en dos la Sierra Sevil, 1,5 km los Oscuros y 8 km los Estrechos del Balcez. Haciendo un total de 26,5Km de descenso.
Más de 25 barrancos son afluentes de este grandioso río, algunos muy conocidos como Cueva Cabrito, Fondo, Alborcelar, Cautiecho, etc, etc. Finalmente desembocará en el río Alcanadre tras pasar la población de Bierge.














En Julio de 2012 descendimos unos de los ríos principales de la Sierra, el Río Alcanadre, con una extensión de 28Km y 19h de descenso. Fuimos los mismos integrantes que esta vez en el Balcez.

Tres años mas tarde, y después de varias intentonas, finalmente este era nuestro año y mes para afrontar este gran “reto”, el Balcez Integral, non-stop y totalmente de forma autónoma.

Dos semanas antes de esta gran experiencia, realizamos la fase preparatoria, con vivac incluido, en el Rio Girona, mas conocido como Barranc de l´Infern.
Descendimos en 11h y con un desnivel positivo acumulado de 1.400m, las cuatro cascadas más altas de esta cuenca, Manueles, Fleix, y las dos de Llidoners y sus cinco barrancos, Manueles, Infern, Fleix, Llidoners y Racons.


Mayo 2015
Integrantes: Diego Caballero, Alfredo Tortosa, Jose Dolz y Andrés Verdú.

Viernes 8
Salida desde Valencia con dos vehículos dirección Alberuela donde dejamos uno, continuamos hacia As Bellostas con llegada a la 1:40 de la madrugada donde hacemos vivac justo en la entrada del Balcez Superior.




Sábado 9, día del descenso.
Balcez Superior.




Hora prevista de entrar al cauce las 6:00, pero como no dormimos mucho tiempo finalmente entramos a las 7:00.






Foto inicio





Tras la primera hora de descenso nos encontramos la primera sorpresa, una familia de corzos, creemos, estaban paciblemente bebiendo agua en el cauce a unos metros de nosotros.








Esta parte superior carece de interés deportivo, salvo el derivado del esfuerzo horario. Pero si que tiene un paisaje inolvidable y permanente y tal como cuenta Enrique Salamero en su libro, es un terreno para “románticos” y no para deportistas.

Cruzamos algunos estrechos, muy bonitos, donde era obligado zambullirnos en el agua, y que después de tantas horas andando se agradecía.




































Finalmente y después de 7 horas llegamos al caos de los Oscuros del Balcez. Este tramo inicial se nos hizo bastante duro física y mentalmente por su monotonía y sus tramos de río llano que se hacen infinitos.

















Nos reagrupamos en el caos y aprovechamos para comer, descansar y preparar arneses y cuerdas para los tres rapeles y únicos que hay en todo el descenso integral.
Inicio Oscuros

Los Oscuros, como siempre, no defraudan.

Este tramo es una fisura entre montañas que podemos observar ya desde lejos. Este sí, y no como el tramo anterior, es mas de carácter deportivo. Tiene tres rapels, y únicos en todo el Balcez, aunque solamente hicimos dos.
Aquí sí que disfrutamos, se nos olvidaron las siete horas que llevábamos de descenso. Se nos hizo corto, en tan solo cuarenta y cinco minutos nos presentamos en el Tranco de las Olas, final de los Oscuros.

Los Estrechos del Balcez.

Este tramo es bastante largo y monótono, casi sin emoción aunque esta emoción se multiplica por la majestuosidad de sus pasillos, la luz y el color que hace que cada rincón cambie observándose la erosión que ejerce el agua sobre la roca.
Su primera parte es ancha, comenzando en la desembocadura de los barrancos Estrecho y Fontaneta. En veinte minutos llegamos a la primera parte estrecha, el Estrecho d´O Cajigar, es estrecho pero nada que ver con lo que tiene que llegar.
Al pasar este estrecho nos encontramos las desembocaduras de los barrancos Fondo y Cautiecho, dando comienzo a otra parte encajonada conocida como el Estrecho de Cautiecho.
Al salir de este llegamos al punto de no retorno, la senda de salida de Cueva Cabrito, es la última escapatoria de todo el Balcez. Estamos mermados de fuerzas, unos más que otros, nos paramos unos minutos frente la senda, cogemos aire, nos miramos fijamente a los ojos y todos a un mismo son continuamos aguas abajo. Ya no hay vuelta atrás.
Son las seis de la tarde y entramos en el Gran Pasillo Central. Algunos ya lo conocemos y sabemos lo que nos venía encima, pero esto lo habíamos empezado y teníamos que terminarlo. El que quiera conocer más sobre el pasillo aconsejo que se adentre en el.

Últimos estrechos, dos horas de pasillo

Por fin se abre el cauce y empezamos a ver la vegetación por los laterales al mismo tiempo que el sol va mostrando sus últimos rayos. Desde este punto sabemos que no nos queda mas de una hora de actividad, “¡¡YA LO TENEMOS CHICOS!!”, grita alguien de nosotros.









Y por fin, después de un meandro, divisamos al fondo el puente de la Alberuela, el final de nuestro viaje. No podemos aguantar la emoción y antes de salir del cauce ya nos estábamos felicitando. Solo nos separa del final una última trepada para llegar hasta la carretera, y ahora si que si, las nueve de la noche y catorce horas de actividad, “¡¡¡¡LO HEMOS CONSEGUIDO AMIGUETES!!!!”, y los cuatro amiguetes juntamos nuestras manos, como de costumbre cuando terminamos un descenso, pero este descenso no ha sido como otros, ha sido especial.




Foto finish


Antes de cambiarnos, lo primero que hacemos es contactar con el móvil con nuestros familiares para informar de que estamos los cuatro bien y ya fuera.

Nos cambiamos, recogemos bártulos y al Hotel, a la cena homenaje que nos espera.
Dedicado por Karmelo Oñate

Datos de la actividad.
Hora de inicio: 7:00
Hora de fin: 21:00
Altura del inicio: 968m
Altura del final: 520m
Km recorridos: 26,5
Total: 14 horas
Animales muertos: 6 entre jabalíes y corzos
Animales vivos: serpientes, corzos, zorros, buitres, cabras, corderos y algún barranquista…


Redacción: Andrés.

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